La oportunidad del apagón para los puertos deportivos españoles
El reciente apagón eléctrico vivido en España el pasado lunes 28 de abril ha puesto de manifiesto una realidad que desde la ANBE llevamos tiempo observando: la necesidad urgente de adaptar nuestras infraestructuras eléctricas al presente (y futuro) energético que reclama la descarbonización de todos los sectores, incluida la náutica.
Durante años, algunos puertos deportivos en España han intentado dar el paso hacia la transición energética solicitando la ampliación de potencia eléctrica para poder alimentar redes de recarga para barcos y coches eléctricos, paneles solares u otras soluciones sostenibles. Pero en la mayoría de los casos, las compañías eléctricas rechazaban estas ampliaciones alegando limitaciones técnicas, costes inasumibles o falta de capacidad en las infraestructuras.
El apagón del 28 de abril ha hecho saltar las alarmas a nivel nacional, pero también debe verse como una oportunidad. Una oportunidad para que Red Eléctrica Española acelere su modernización, adapte sus infraestructuras y facilite de una vez por todas la transición energética en sectores estratégicos como el marítimo y portuario.
Queremos compartir las reflexiones de un experto alemán en sistemas eléctricos, Maximilian Krüger, que arrojan luz sobre las causas estructurales de este tipo de fallos. Krüger destaca la baja interconexión de la red española con Europa (apenas un 3%, cuando la Comisión Europea recomienda un mínimo del 10%), la alta dependencia de energías renovables sin respaldo suficiente y la falta de grandes sistemas de almacenamiento y gestión de la demanda. Todo ello conforma un escenario frágil ante cualquier perturbación.
En países como Alemania, estos riesgos se abordaron hace años con una estrategia coordinada que incluyó:
- Ampliación de interconexiones eléctricas
- Instalación de reservas energéticas de respuesta rápida
- Inversión masiva en almacenamiento a gran escala
- Digitalización predictiva de las redes
- Refuerzo de la ciberseguridad energética
La visión experta: Manel Cebrian, ingeniero industrial y miembro de la Comisión de Puertos Energéticamente Sostenibles de la ANBE opina:
“La electrificación de los puertos deportivos no es una moda ni una exigencia normativa, es una cuestión de visión de futuro. La transformación de la movilidad náutica es inevitable, y vendrá acompañada de una nueva demanda energética que no podemos ignorar. Por eso, más que preguntarnos si hoy existen suficientes barcos o vehículos eléctricos para justificar una inversión, deberíamos preguntarnos si nuestros puertos estarán listos cuando esa demanda crezca de forma exponencial. Los puertos que no se preparen corren el riesgo de quedarse atrás, tanto a nivel operativo como competitivo.”
Ventajas estratégicas de reforzar la infraestructura de carga energética en puertos deportivos
Dotar a los puertos deportivos de una infraestructura sólida de recarga energética no solo es un paso necesario para la sostenibilidad, sino también una decisión estratégica clave para mantener su competitividad en un entorno en transformación. La electrificación de la movilidad —tanto terrestre como marítima— está en pleno auge, y los puertos que ofrezcan soluciones energéticas completas estarán mejor posicionados para atraer a un nuevo perfil de usuario: más consciente, más tecnológico y más exigente con el impacto ambiental.
Además, invertir ahora en infraestructuras de carga permite a los gestores portuarios anticiparse a futuras obligaciones normativas, beneficiarse de posibles ayudas públicas y evitar cuellos de botella cuando la demanda se dispare. En lugar de reaccionar con urgencia más adelante, los puertos que actúen desde hoy podrán planificar su transición con criterio técnico, eficiencia económica y sostenibilidad real.
Desde la ANBE creemos que este es el momento para que España siga ese ejemplo y permita que los puertos deportivos puedan formar parte de una red inteligente, sostenible y resiliente. No solo para evitar apagones, sino para construir un sistema eléctrico preparado para liderar el cambio.
La movilidad eléctrica marina no puede avanzar sin una infraestructura eléctrica moderna que acompañe ese avance. Por eso, el apagón debe ser visto no como un fracaso, sino como un punto de inflexión.
Ahora más que nunca, es el momento de dar luz verde a la transición energética en los puertos de España.
